Rebuscando entre algunos archivos de trabajo de mi madre,
los que me traje hace tiempo a Madrid, he encontrado un cd con fotografías de
algunos retratos. En algunos casos están inacabados: me refiero a retratos que
sí acabó, pero a los que hicieron las fotos cuando aún estaban a medio proceso.
No sé si los pondré. De momento os dejo con el retrato de quien fuera maestro
de mi madre: Antonio Pedrero. El gran Antonio, al que siempre que viajo a
Zamora acabo encontrándome en algún rincón del casco antiguo. El gran Antonio,
un hombre al que jamás se le han subido los humos a la cabeza, pese a su talla
como artista y a que es uno de los hombres más reputados de nuestra tierra. Mi
madre y él fueron, además de alumna y maestro, grandes amigos.